Buenos Aires se inunda, pero no exactamente de millones, simplemente de agua, causa de la falta de inversión en un sistema de napas decente, entre otras cosas. Hace décadas que se escucha a cada cabeza de la ciudad echarle la culpa a los antecesores. ¿Estrategias propias? Que es eso, che! Así, lo mismo hoy que siempre.
Nuestro actual Jefe de Gobierno Porteño, del cual no sabemos si es más presidente Xeneize que Jefe de Gobierno, echa la culpa sobre los nombres del pasado. Mourice, y si hacemos cotizar en bolsa a la Ciudad de Buenos Aires? ¡¡Así tal vez consigamos accionistas para remediar los desagües!! ¿Cómo sería el nombre de la acción? ¿BSA? ¿BAI? BSM (la M de Mourice, para no dejarte afuera!) Ya me imagino la bolsa de Tokio abriendo con BSA al alza. Porque si vamos a cotizar vamos a cotizar bien!.
No estaría mal que tanta agua que ha corrido se haya llevado a más de uno. Ya que caemos en desgracia, por lo menos desgraciemonos justificadamente. De lo que hay que tener cuidado es que con tanto alboroto acuífero, el agua pudo haber llegado a los cementerios y ahí levantar a algún muerto que al fin descansaba en paz!.
Dice este líder nato, el Mourice, que si en dos años hay una tormenta como la de esta semana, se van a repetir las inundaciones. Yo le respondo que si de aca a dos años, el banco viene a cobrarme la hipoteca, se va a encontrar con la misma alcancía vacía y mi cara de inocente deudora. Vos Mourice, decile al banco, al mío, que dos años no es tiempo suficiente para arreglar las napas o las cuentas de una!!
Esto ha sido todo por hoy,
Soy Lia Churrasco,
Churrasco Ñus para La novia olvidada
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